El segundo paro nacional convocado por la CGT y las dos CTA se cumple en forma contundente. La adhesión de los distintos gremios que integran las centrales obreras fue masiva y eso se traduce en una fuerte ausencia en los lugares de trabajo. No funcionan trenes ni subtes, tampoco hay vuelos y apenas circulan unos pocos colectivos, lo que lleva a que en la calle no haya prácticamente movimiento. El Gobierno apela a todo su repertorio para tratar de desacreditar la huelga que expone el masivo rechazo a las políticas de ajuste de Javier Milei y al intento de produndizarlas aún más con la sanción de la Ley Bases que se discute en el Senado. Las imágenes, sin embargo, desimienten las declaraciones de los funcionarios que buscan minimizar el impacto de la protesta.
El Presidente usó las redes para expresarse acerca del paro general dispuesto por las centrales obreras. «Nota de color… ¿Saben cómo se dice Faraón en hebreo? Les cuento… PARO. A buen entendedor pocas palabras bastan… VIVA LA LIBERTAD CARAJO», posteó en X. Su publicación en esa red social llegó luego de las declaraciones de sus escuderos contra el paro: Patricia Bullrich y Manuel Adorni. La ministra de Seguridad y el vocero presidencial buscaron instalar el discurso que decidió enarbolar el Gobierno contra el paro. En esa línea le atribuyeron motivaciones políticas y falta de motivos legítimos, hicieron eje en los pocos y aislados ataques a colectivos y buscaron desacreditar a los dirigentes gremiales. El portavoz ratificó los descuentos a los estatales que adhieren a la medida.
Las amenazas no amilanaron a los trabajadores del Estado. El secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, destacó el acatamiento al paro general en la administración pública «es casi total, promedia el 97%».
«Los estatales estamos parando por los despidos y la reducción de los salarios, entre otras cuestiones”, afirmó en declaraciones radiales a Gustavo Sylvestre, y remató: “El paro contundente está demostrando que estamos peleando”, remarcó.
El transporte público es uno de los sectores más afectados por el paro general de la Confederación General del Trabajo (CGT) porque todos los gremios adhieren a la medida. Colectivos, subtes y trenes dejaron de funcionar el miércoles 8 a la medianoche y los servicios seguirán paralizados hasta las 24 de este jueves. Tampoco hay vuelos de cabotaje ni internacionales porque los 12 gremios del sector aeronáutico también se plegaron a la huelga en rechazo al ajuste pero también al intento de Milei de terminar con Aerolíneas Argentinas como así también su política de “cielos abiertos” para favorecer a las low-cost.
Solo funcionan algunos colectivos de la empresa DOTA, enfrentada a la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Casi en rol de vocero de esa empresa el Gobierno se encargó de difundir la lista de líneas de colectivos que tienen unidades en circulación. Lo hizo a través de la Secretaría de Transporte, que detalló que son la 6, 7, 8, 9, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 78, 79, 84, 87, 91, 99, 100, 101, 106, 107, 108, 111, 115, 117, 127, 130, 134, 135, 146, 150, 161, 164, 177 y 188.
Frente a los hechos aislados de ataques a colectivos que hubo en las primeras horas del paro, el Gobierno anunció también la puesta en marcha de un operativo de seguridad para garantizar la circulación de las unidades manejadas por quienes no adhieren a la huelga.
Las actividades educativas están paralizadas casi por completo en todo el país. La huelga impacta con fuerza en las escuelas públicas y los docentes privados también llamaron a parar, aunque en ese sector el acatamiento es dispar.
A pesar de la medida de fuerza, la Anses garantizó el pago a los jubilados. Si bien no hay bancos ante la adhesión al paro de la Asociación Bancaria los haberes fueron acreditados en las cuentas de aquellos que en función del cronograma establecido debían cobrar hoy y las entidades bancarias mantiene la operatividad en canales electrónicos como home banking, aplicaciones bancarias y billeteras electrónicas, sin afectar las transacciones comerciales y de pagos.